Todo comienza nuevamente... una llamada telefónica y las palabras mágicas, " Y si vamos al cierre de temporada", realmente la temporada se hace corta y la fecha del cierre parece siempre una buena excusa para reunir a los amigos...
un whatsapp al grupo de pescadores y en unos minutos ya están todos los confirmados, la verdad es que todos sabían que volveríamos en esta fecha pero siempre hay que recordarles lo mucho que les gusta viajar...
esta vez Caco, Carlos, Jorge, Julio y Yo solos los que partimos sin atraso el dia miércoles 30 en un vuelo directo de Lan a Balmaceda, apenas llegamos logramos distinguir entre la gran cantidad de pescadores a nuestros amigos y guias Andy, Guille y Monty y derecho al agua, nos fuimos derecho a puerto Ibañez justo bajo la caída del agua, el pique estuvo lento, el agua muy turbia y mucho viento, yo fui el único que logro sacar una marrón, de buen tamaño pero ni cercana a las que habíamos esperado. esa noche llegamos al Lodge Patagonia Magic Waters de nuestro amigo Eduardo barrueto, como siempre la atención y recepción fue espectacular (nota aparte, he tenido la oportunidad de recorrer muchos lugares de chile y fuera del país, aquí uno se siente como en casa).
Al dia siguiente nos toco con un gran sol sobre un paisaje nevado, fuimos a un Spring Creek cercano afluente del río Ñirehuao, buena pesca en un arroyo no mayor a 1,5 metros de ancho, se podía pescar con un pie en cada orilla, usando streamer oliva era cosa de tirar ay abrazar.
recuerdo que el año anterior en esta misma fecha me hice la america con mosca seca y atractores, en esta oportunidad y durante todo el viaje no logre ninguna clavada con ellos y los streamer y ninfas era lo único que lograba estimular a las marrones.
para el dia final y plato especial, llegamos al rio Mogotes y despues de verificar que no había gran acción nos dirigimos hacia la desembocadura del lago desierto, cruzando el río Balboa, aqui el agua del rio paloma, transparente y quieta permitia ver a grandes truchas descansando en toda la extensión del rio, Eduardo me señala una junto a un gran tronco, apenas pude arrastrarme hasta llegar al punto ideal para lanzar mi mosca... dos segundos y tac, una gran clavada y una gran corrida al centro del rio, resulto ser el trofeo del dia un gran Fario macho con una bella coloración...
justo antes de partir decidimos pescar el lago barroso, bajo una intensa lluvia y frio, llegamos y notamos una gran actividad, uno, dos tres piques en pocos minutos, al llegar a la orilla donde esta la playita lance sin mayor expectativa, de repente una gran clavada, de esas que pocas veces se ven, la caña se curva casi a quebrar y un gran movimiento en el agua, la linea me quema el dedo y se pierdo la que de seguro habría sido el trofeo del viaje....
regresamos a Santiago agradeciendo a Eduardo y su familia la grata estadía, contando los meses para regresar...